Al Sr. Juez de la Audiencia Nacional

El que suscribe, Peio Mirena Aramaio Etxaburu, de 75 años de edad, casado, con domicilio en Ondárroa (Bizkaia), y haciendo uso del derecho que le confiere, se dirige a usted con el debido respeto y promete decir la verdad y nada mas que la verdad, y por medio del presente escrito,

DECLARA:

1.Que durante el franquismo, fue detenido y encarcelado en los años 1964, 1967, 1969, 1970 y 1973.

2.Que tras las detenciones, fue interrogado y torturado en las dependencias policiales de Bilbao. En tres ocasiones en el Cuartel de la Guardia Civil de La Salve, y en las otras dos en la Jefatura Superior de Policía de Indautxu.

3. Que en el año 1970, los días 3, 4 y 5 de Mayo, se le hacen inolvidables y recuerda la angustia vivida en la comisaría de Indautxu. Tres días de martirio, con el resultado de: contusiones importantes y abiertas en la frente y en la nariz y con serias lesiones en el tabique nasal y hemorragias que no cesaban, el pómulo derecho reventado con pérdida de visión temporal, hematomas en todo el cuerpo por golpes de estaca en la zona lumbar, abdominal, renal y piernas, llegando a orinar sangre durante varios días y sin haberle prestado ninguna atención médica.

4.Que aquellas consecuencias de tortura con ensañamiento, las sigue sufriendo al día de hoy, donde sigue padeciendo una insuficiencia renal aguda, ya a punto de diálisis.

5.Que la ficha de ingreso en prisión con fotografías de frente y perfil sería la prueba inequívoca y elocuente de ello.

6.Que después de varias indagaciones, parece ser, que el resultado de búsqueda ha hecho que aquel policía torturador haya sido localizado. Reside en un municipio de la provincia de Valladolid, tiene 78 años de edad, y que por razones obvias no desea citar su domicilio ni las fuentes de investigación.

7.Que desea personarse en la localidad donde reside, acompañado por dos personas de su confianza, para que sean testigos de lo que allí pudiera suceder.

8.Que si se produce el encuentro, se le haría recordar aquellos episodios de suplicio sufridas por este declarante, exigiéndole a que pida perdón. Con el perdón, si así fuere, este servidor se daría por satisfecho.

9.Que la historia no muy lejana y la reciente nos dice, que el perdón sigue siendo aún la asignatura pendiente. No lo hizo el franquismo, ni la Jerarquía de la Iglesia, ni los GAL, ni los torturadores, ni los corruptos de los cargos públicos y políticos… que actuaron con total impunidad. Existen aún algunos rostros del franquismo que son reclamados por la justicia internacional para que sean extraditados. Se debe señalar que estos tampoco están dando muestras de arrepentimiento.

10.Que la paz y la convivencia no serán posibles si no hay justicia y reparación, que es lo que reclama este servidor. El borrón y cuenta nueva sin justicia hizo que aún las heridas psíquicas no se hayan cicatrizado.

11.Que con la edad que tiene y las graves enfermedades que padece (insuficiencia renal y cardiaca) y antes que deje de existir, si el verdugo hallado no accediera al perdón exigido, en ese caso, le correspondería a él que le mostrara la otra mejilla, porque con la de este servidor hizo que no pareciera ni persona.

12.Que dado de lo delicado del caso, la alteración del estado emocional de este declarante, podría condicionar el resultado del encuentro que se pretende de forma no deseable.

Para que conste a los efectos oportunos, da por concluida la presente declaración.

Ondárroa a 2 de Mayo de 2015.

Juzgados de la Audiencia Nacional
C/ Prim, nº 12
28004-Madrid